Cómo el equipo prescribe un incendio

El fuego prescrito es el uso intencional del fuego en un momento y lugar específicos, bajo condiciones y especificaciones establecidas, para lograr objetivos biológicos o de manejo de recursos específicos. En la planificación de una quema prescrita, el jefe de quema asignado en realidad escribe una "receta" detallada para la quema.
Todos los planes de quema prescrita deben contener:
- Ubicación del sitio y mapa, incluido el número de acres a quemar
- Nombre del jefe de quemaduras
- Objetivos de manejo y objetivos específicos de quema para la quema
- Un mapa de la unidad de combustión (área que se quemará) que incluya una descripción de los combustibles que se quemarán (qué tipo de vegetación), los cortafuegos y las líneas de control planificadas, qué trabajo de preparación se ha realizado y cualquier peligro importante que pueda existir dentro de la unidad de combustión y adyacente a ella
- Un plan de manejo de humo que incluya objetivos de manejo de humo, posibles áreas críticas sensibles al humo y técnicas que se utilizarán para mitigar los posibles impactos del humo
- Parámetros meteorológicos y de combustible, para incluir cualquier dirección del viento que tenga un impacto positivo o negativo en la quema, la humedad relativa del día, la velocidad del viento, la altura de la mezcla atmosférica y una medición de las condiciones de sequía
- Una lista del personal y el equipo necesarios
- Planes específicos para encender el fuego, sostenerlo o contenerlo, y un plan de contingencia en caso de error
- Información de contacto de todo el personal y sus contactos de emergencia

El día de la quema, el jefe de la quema notifica a las autoridades pertinentes de la quema, como los departamentos de bomberos locales y el Departamento Forestal, y evalúa el pronóstico del tiempo de incendios del Servicio Meteorológico Nacional para esa área específica. Si las condiciones climáticas no cumplen con lo prescrito en el plan de quema, el jefe de quema cancela la quema. Se realiza una prueba de fuego para asegurarse de que el comportamiento del fuego esté dentro del alcance de lo que dicta el plan de quema.
No todos los incendios son iguales ni tienen los mismos efectos. Dependiendo de la cantidad y el tipo de combustible en el área (vegetación que se quemará) y el clima del día, los incendios pueden arder a diferentes intensidades. Para complicar aún más las cosas, la intensidad puede verse alterada por la forma o el patrón en que se enciende el fuego. Algunos patrones permitirán un fuego más caliente cuando se desee, mientras que otros patrones permitirán que se queme un fuego más frío y lento. Cuando el jefe de quema crea el plan de quema, tiene en cuenta qué intensidad de fuego se necesita para crear el efecto deseado en el hábitat de la vida silvestre. La intensidad del fuego también depende de si esa área específica se ha quemado antes en el pasado. Los supervisores del Área de Manejo de Vida Silvestre del DWR vigilan de cerca sus unidades de quema para decidir cuándo y cómo una quema prescrita podría beneficiar al hábitat.
Good Fire : Cómo DWR usa el fuego prescrito para restaurar la naturaleza
Hemos sido condicionados a pensar en el fuego únicamente como una fuerza destructiva, pero para la vida silvestre, los bosques y las praderas, el fuego también puede ser restaurador y una fuerza para el bien. El fuego prescrito es #GoodFire.
